Tobramicina: usos, efectos y mecanismo de acción
Introducción
La tobramicina es un antibiótico utilizado para tratar infecciones bacterianas en diversas partes del cuerpo. Fue descubierta en 1967 y ha sido ampliamente utilizada desde entonces debido a su efectividad en el tratamiento de infecciones resistentes a otros antibióticos.
Usos actuales
La tobramicina se utiliza comúnmente para tratar infecciones respiratorias en pacientes con fibrosis quística y neumonía. También se utiliza para tratar infecciones oculares, infecciones de las vías urinarias y sepsis.
Efectos benéficos y adversos
Los efectos benéficos de la tobramicina incluyen una alta eficacia contra las bacterias gramnegativas y una baja incidencia de resistencia. Sin embargo, también tiene efectos adversos, como daño renal, tinnitus y pérdida de audición.
Obtención
La tobramicina se obtiene a partir de la fermentación de la bacteria Streptomyces tenebrarius.
Estado actual de la investigación
La investigación actual se centra en el desarrollo de nuevas formulaciones de tobramicina para mejorar su eficacia y reducir los efectos adversos.
Mecanismo de acción
La tobramicina actúa uniéndose a la subunidad 30S del ribosoma bacteriano, lo que impide la síntesis de proteínas y, por lo tanto, inhibe la multiplicación bacteriana.
Resumen
La tobramicina es un antibiótico efectivo utilizado para tratar diversas infecciones bacterianas, aunque tiene efectos adversos como daño renal y pérdida de audición. Se obtiene a partir de la fermentación de la bacteria Streptomyces tenebrarius y su mecanismo de acción se basa en la inhibición de la síntesis de proteínas bacterianas.