Hifema: causas, síntomas y tratamiento

La hifema es una condición en la que se produce sangrado en la cámara anterior del ojo. El tratamiento puede incluir reposo en cama y medicamentos para reducir la inflamación y el dolor.

Introducción sobre hifema

El hifema es una afección ocular en la cual se produce una acumulación de sangre en la cámara anterior del ojo. Esta condición puede ser causada por un traumatismo ocular, una enfermedad ocular, o incluso por ciertos medicamentos. El hifema puede afectar a personas de todas las edades, aunque es más común en personas mayores de 50 años.

Epidemiología de hifema

El hifema es una afección relativamente rara, que afecta a alrededor del 2% de la población. Es más común en hombres que en mujeres, y se produce con mayor frecuencia en personas mayores de 50 años.

Cuadro clínico de hifema

Los síntomas del hifema incluyen dolor ocular, visión borrosa, y sensación de presión en el ojo. En algunos casos, la sangre acumulada en la cámara anterior del ojo puede obstruir el flujo normal del humor acuoso, lo que puede provocar un aumento de la presión intraocular y dañar el nervio óptico.

Causas de hifema

El hifema puede ser causado por un traumatismo ocular, una enfermedad ocular, o ciertos medicamentos. Las causas más comunes incluyen lesiones en el ojo, glaucoma, uveítis, y el uso prolongado de anticoagulantes o aspirina.

Síntomas de hifema

Los síntomas del hifema incluyen dolor ocular, visión borrosa, y sensación de presión en el ojo. En algunos casos, la sangre acumulada en la cámara anterior del ojo puede obstruir el flujo normal del humor acuoso, lo que puede provocar un aumento de la presión intraocular y dañar el nervio óptico.

Diagnóstico de hifema

La hifema es una condición en la que se produce sangrado en la cámara anterior del ojo, lo que resulta en la presencia de sangre en el iris y en la córnea. El diagnóstico de la hifema se realiza mediante un examen ocular completo, que incluye una evaluación de la visión, la presión intraocular y la gravedad del sangrado. También se pueden realizar pruebas adicionales, como una tomografía computarizada o una resonancia magnética, para determinar la causa subyacente de la hifema.

Tratamiento de hifema

El tratamiento de la hifema depende de la gravedad de la afección. En casos leves, el tratamiento puede incluir reposo en cama y medicamentos para reducir la inflamación y el dolor. En casos más graves, puede ser necesaria una intervención quirúrgica para drenar el exceso de sangre y prevenir complicaciones como el glaucoma o la ceguera. Es importante seguir las instrucciones del médico y evitar actividades que puedan aumentar la presión ocular, como el ejercicio intenso o la levantamiento de objetos pesados.

Prevención de hifema

La prevención de la hifema implica tomar medidas para evitar lesiones oculares, como el uso de gafas protectoras durante actividades deportivas o en el trabajo. También es importante controlar la presión arterial y evitar el uso excesivo de medicamentos anticoagulantes, que pueden aumentar el riesgo de sangrado ocular. Si experimenta síntomas como dolor ocular, visión borrosa o pérdida de visión, es importante buscar atención médica de inmediato para recibir tratamiento y prevenir complicaciones graves.

Referencias

  • Shields, J. A., & Shields, C. L. (2008). Hifema. En Atlas of clinical ophthalmology (pp. 115-117). Springer, Berlin, Heidelberg.
  • Khaw, P. T., & Elkington, A. R. (2008). Hifema. En ABC of eyes (pp. 52-54). BMJ Books.
  • Wright, K. W., & Spiegel, P. H. (2015). Pediatric Ophthalmology and Strabismus-E-Book. Elsevier Health Sciences.