Fas receptores de muerte en la superficie celular: una posible diana terapéutica
El receptor de muerte de superficie celular Fas (Fas) y su ligando FasL (Fas ligando) son componentes clave del sistema de señalización de muerte celular programada. La vía de señalización Fas/FasL es esencial para la eliminación segura de células dañadas y/o infectadas, pero también puede contribuir a la patogénesis de enfermedades autoinflamatorias y cáncer. En esta revisión, discutimos los mecanismos moleculares y celulares subyacentes a la activación de Fas/FasL, así como su papel en la regulación de la muerte celular, la inflamación y la polarización de macrófagos tumorales.
¿Qué son los receptores de muerte Fas?
Los receptores de muerte Fas son proteínas de la membrana celular que desempeñan un papel fundamental en la regulación de la muerte celular programada (apoptosis). Se les conoce también como CD95 o APO-1, y están implicados en la eliminación de células dañadas o infectadas por el sistema inmunitario.
¿Cómo funcionan los receptores de muerte Fas?
Los receptores de muerte Fas se unen a una proteína llamada FasL, que se encuentra en la superficie de las células. Esta unión activa una cascada de señalización intracelular que conduce a la apoptosis de la célula. Los receptores de muerte Fas también pueden interactuar con otras proteínas implicadas en la apoptosis, como las caspasas, para amplificar la señalización y garantizar la eliminación de la célula.
¿Qué implicaciones tienen los receptores de muerte Fas en la salud humana?
Los receptores de muerte Fas son esenciales para el correcto funcionamiento del sistema inmune y la eliminación de células cancerosas. Sin embargo, también pueden contribuir a la patogénesis de enfermedades autoinmunitarias y neurodegenerativas, como la esclerosis múltiple o el Alzheimer. Por ello, se están desarrollando terapias que modulan la señalización de los receptores de muerte Fas para tratar estas enfermedades.
¿Qué enfoques terapéuticos se están investigando para los receptores de muerte Fas?
Actualmente, se están evaluando distintas estrategias terapéuticas para modular la señalización de los receptores de muerte Fas en enfermedades autoinmunitarias y neurodegenerativas. Algunas de ellas incluyen el uso de anticuerpos monoclonales que bloquean la unión de FasL a los receptores de muerte Fas, o moléculas pequeñas que inhiben la actividad de las caspasas. Estos enfoques están aún en fase experimental, pero podrían tener un gran potencial en el tratamiento de enfermedades graves y sin cura actualmente.