Éxtasis: efectos, usos y riesgos para la salud humana

Introducción

El éxtasis es una droga recreativa que actúa como estimulante y alucinógeno. Se consume principalmente en entornos de fiesta y ocio, y su uso se ha popularizado en los últimos años.

Usos actuales de este componente

El éxtasis se utiliza con fines recreativos, para aumentar la energía y mejorar la sociabilidad en entornos de fiesta y ocio. También se ha investigado su uso en terapias psicológicas para tratar trastornos como el estrés postraumático o la ansiedad.

Efectos benéficos y adversos de este componente en la salud humana

El éxtasis puede tener efectos beneficiosos a corto plazo, como la sensación de euforia y la mejora del estado de ánimo. Sin embargo, su uso prolongado puede producir efectos adversos en la salud, como la neurotoxicidad y el daño cerebral, así como problemas de ansiedad, depresión y problemas de memoria.

¿Cómo se obtiene este componente?

El éxtasis se obtiene a partir de sustancias sintéticas, como la MDMA. La MDMA se produce en laboratorios clandestinos y se vende en forma de pastillas o polvo.

Estado actual de la investigación de este compuesto

La investigación sobre los efectos del éxtasis en la salud humana está en curso. Se están realizando estudios para evaluar la seguridad y eficacia de su uso terapéutico en trastornos psicológicos.

Mecanismo de acción del término

El éxtasis actúa en el cerebro, liberando grandes cantidades de serotonina y dopamina, lo que produce la sensación de euforia y bienestar. Sin embargo, su consumo también puede provocar la muerte de células cerebrales y dañar los sistemas de neurotransmisores, lo que puede tener consecuencias graves en la salud.

Resumen

El éxtasis es una droga recreativa que puede tener efectos beneficiosos a corto plazo, pero también puede producir daños a largo plazo en la salud. Su uso se ha popularizado en los últimos años, pero es importante tener en cuenta los riesgos asociados a su consumo.

• Green AR, Mechan AO, Elliott JM, O’Shea E, Colado MI (2003). The pharmacology and clinical pharmacology of 3,4-methylenedioxymethamphetamine (MDMA, «ecstasy»). Pharmacol Rev 55 (3): 463–508. doi:10.1124/pr.55.3.3.
• Ricaurte GA (1988). «Hallucinogenic amphetamines destroy brain serotonin neurons». Science 240 (4850): 1668–71. doi:10.1126/science.3375813