Confusión: causas, síntomas y tratamiento

La confusión es un estado mental en el que la persona no es capaz de pensar con claridad, identificar su entorno o procesar la información de manera adecuada. Los síntomas incluyen desorientación, pérdida de memoria, dificultad para hablar o pensar, y pueden ser causados por una variedad de factores. El tratamiento de la confusión depende de la causa subyacente y puede incluir terapia cognitivo-conductual, terapia ocupacional o fisioterapia.

Introducción

La confusión es un trastorno en el que una persona experimenta un estado mental alterado que puede incluir desorientación, despersonalización y dificultad para concentrarse. Esta condición puede ser causada por una variedad de factores y puede ser un síntoma de una enfermedad subyacente.

Epidemiología de confusión

La confusión es un problema común en la población general y puede ocurrir a cualquier edad. Los estudios han demostrado que las personas mayores tienen un mayor riesgo de desarrollar confusión. Además, la confusión es más común en pacientes hospitalizados y en aquellos que están bajo estrés emocional o físico.

Cuadro clínico de confusión

Los síntomas de la confusión pueden variar según la causa subyacente, pero generalmente incluyen desorientación, despersonalización, dificultad para concentrarse y problemas de memoria. Los pacientes también pueden experimentar cambios en el comportamiento, como agitación o retraimiento social.

Causas de confusión

La confusión puede ser causada por una variedad de factores, incluyendo enfermedades neurológicas, trastornos psiquiátricos, lesiones cerebrales traumáticas, intoxicación por drogas o alcohol, y medicamentos. Además, la confusión puede ser un síntoma de una infección, una enfermedad sistémica o una deficiencia nutricional.

Síntomas de confusión

Además de los síntomas mencionados anteriormente, los pacientes con confusión pueden experimentar otros síntomas, como cambios en el estado de ánimo, problemas para comunicarse, cambios en la percepción sensorial y movimientos corporales anormales.

Diagnóstico de confusión

La confusión es un estado mental en el que la persona no es capaz de pensar con claridad, identificar su entorno o procesar la información de manera adecuada. Los síntomas incluyen desorientación, pérdida de memoria, dificultad para hablar o pensar, y pueden ser causados por una variedad de factores, como trastornos médicos, traumatismos, intoxicación, medicamentos, entre otros.

Para diagnosticar la confusión, es necesario realizar una evaluación clínica, que puede incluir exámenes de sangre, orina, cerebro y pruebas neurológicas. También es importante revisar la historia médica del paciente y determinar cualquier factor que pueda estar contribuyendo a la confusión.

Tratamiento de confusión

El tratamiento de la confusión depende de la causa subyacente. En algunos casos, puede ser necesario hospitalizar al paciente y proporcionarle tratamiento médico intensivo. Si la confusión es causada por medicamentos, se puede ajustar la dosis o cambiar el medicamento.

En otros casos, el tratamiento puede incluir terapia cognitivo-conductual, terapia ocupacional o fisioterapia. También se pueden prescribir medicamentos para controlar los síntomas de la confusión.

Prevención de confusión

Algunas medidas pueden ayudar a prevenir la confusión, como evitar el consumo excesivo de alcohol o drogas, controlar las condiciones médicas subyacentes y seguir las instrucciones de los medicamentos prescritos. También es importante mantener una dieta saludable y hacer ejercicio regularmente para mantener una buena salud cerebral.

Referencias

  • Mariño-Enríquez A, González-Montalvo JI, García-García FJ. Confusión. Medicine – Programa de Formación Médica Continuada Acreditado. 2017;12(02):84–88. doi:10.1016/S0304-5412(17)30013-7
  • Trzepacz PT. CONFUSION AND DELIRIUM. Psychiatr Clin North Am. 2018;41(1):1–11. doi:10.1016/j.psc.2017.10.002
  • https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/003204.htm (accedido el 22/11/2021)