Sordera – Hueso: Causas, Síntomas y Tratamiento

La sordera – hueso es una condición en la que el oído interno no responde a los sonidos a través del aire, sino a través de vibraciones en el cráneo. El tratamiento varía dependiendo de la causa subyacente y puede incluir el uso de dispositivos auditivos o cirugía para implantar un dispositivo de conducción ósea. La prevención incluye evitar la exposición a ruidos fuertes y proteger los oídos en entornos ruidosos.

Introducción

La sordera – hueso es una forma de pérdida auditiva en la que el sonido se transmite a través del hueso en lugar del oído externo y medio. Es causada por problemas en el oído interno o en el nervio auditivo y puede ser congénita o adquirida.

Epidemiología

La sordera – hueso es poco común, representando aproximadamente el 5% de los casos de pérdida auditiva. Puede afectar a personas de todas las edades, pero es más común en personas mayores y en aquellos con problemas de oído preexistentes.

Cuadro clínico

Los síntomas de la sordera – hueso incluyen dificultad para oír sonidos de baja frecuencia, como voces masculinas, problemas para entender el habla en entornos ruidosos y problemas para localizar la dirección del sonido. En casos más graves, puede haber vértigo, náuseas y tinnitus.

Causas

Las causas de la sordera – hueso incluyen lesiones en el oído interno, infecciones, enfermedades autoinmunitarias, otosclerosis y exposición a ruido fuerte. También puede ser causada por ciertas afecciones genéticas como el síndrome de Waardenburg y el síndrome de Treacher Collins.

Síntomas

Los síntomas de la sordera – hueso incluyen dificultad para oír sonidos de baja frecuencia, como voces masculinas, problemas para entender el habla en entornos ruidosos y problemas para localizar la dirección del sonido. En casos más graves, puede haber vértigo, náuseas y tinnitus.

Diagnóstico de sordera – hueso

La sordera – hueso es una condición en la que el oído interno no responde a los sonidos a través del aire, sino a través de vibraciones en el cráneo. El diagnóstico se realiza a través de pruebas audiológicas y de imagenología, como tomografías o resonancias magnéticas. Es importante acudir a un especialista para recibir el diagnóstico correcto y establecer un tratamiento adecuado.

Tratamiento de sordera – hueso

El tratamiento para la sordera – hueso varía dependiendo de la causa subyacente. Una opción es el uso de dispositivos auditivos que transmiten las vibraciones a través del cráneo. En casos graves, puede ser necesaria la cirugía para implantar un dispositivo de conducción ósea. También se puede considerar la terapia del habla para ayudar con la comunicación.

Prevención de sordera – hueso

La sordera – hueso puede ser causada por factores genéticos o enfermedades adquiridas. Sin embargo, algunas medidas pueden ayudar a prevenir su aparición, como evitar la exposición a ruidos fuertes y proteger los oídos en entornos ruidosos. También es importante el diagnóstico y tratamiento temprano de enfermedades que puedan afectar la audición.

Referencias