Vejiga Neurogénica: Síntomas, Causas y Tratamiento
La vejiga neurogénica es una afección en la que el sistema nervioso no funciona correctamente, lo que puede provocar problemas para controlar la micción. El tratamiento de la vejiga neurogénica depende de la causa subyacente de la afección. La prevención de la vejiga neurogénica implica la prevención de las causas subyacentes de la afección.
Introducción
La vejiga neurogénica es un trastorno del sistema nervioso que afecta la capacidad de la vejiga para almacenar y vaciar la orina. Este problema puede ser causado por una lesión en la médula espinal, una enfermedad neurológica o una lesión cerebral. La vejiga neurogénica puede ser debilitante y afectar la calidad de vida de las personas que la padecen.
Epidemiología
La vejiga neurogénica es un problema común en personas con lesiones de la médula espinal, y se estima que afecta a alrededor del 80% de las personas con lesiones de la médula espinal. También es común en personas con enfermedades neurológicas como la esclerosis múltiple y la enfermedad de Parkinson.
Cuadro clínico
Los síntomas de la vejiga neurogénica pueden incluir incontinencia urinaria, necesidad urgente de orinar, dificultad para vaciar completamente la vejiga y frecuencia urinaria. También puede haber infecciones urinarias recurrentes y cálculos renales.
Causas
La vejiga neurogénica puede ser causada por una lesión en la médula espinal, una enfermedad neurológica como la esclerosis múltiple o la enfermedad de Parkinson, una lesión cerebral o una infección del sistema nervioso.
Síntomas
Los síntomas de la vejiga neurogénica pueden incluir incontinencia urinaria, necesidad urgente de orinar, dificultad para vaciar completamente la vejiga y frecuencia urinaria. También puede haber infecciones urinarias recurrentes y cálculos renales.
Diagnóstico de vejiga neurogénica
La vejiga neurogénica es una afección en la que el sistema nervioso no funciona correctamente, lo que puede provocar problemas para controlar la micción. El diagnóstico de esta afección se realiza a través de una evaluación médica completa, que incluye la historia clínica del paciente, un examen físico y pruebas diagnósticas como la urodinamia y la cistoscopia. La urodinamia es una prueba que mide la presión en la vejiga y la uretra durante la micción, mientras que la cistoscopia es una prueba que utiliza un tubo delgado con una cámara para examinar el interior de la vejiga.
Tratamiento de vejiga neurogénica
El tratamiento de la vejiga neurogénica depende de la causa subyacente de la afección. En algunos casos, el tratamiento puede incluir medicamentos para relajar los músculos de la vejiga o para estimular la micción. En otros casos, puede ser necesario realizar una cirugía para reparar los nervios dañados o para corregir problemas estructurales en la vejiga. Además, los pacientes con vejiga neurogénica pueden beneficiarse de la terapia de entrenamiento de la vejiga, que implica el uso de técnicas de relajación y la programación de horarios regulares para orinar.
Prevención de vejiga neurogénica
La prevención de la vejiga neurogénica implica la prevención de las causas subyacentes de la afección. Algunas de las causas más comunes de la vejiga neurogénica incluyen lesiones en la médula espinal, enfermedades neurológicas y ciertas afecciones médicas. Para prevenir la vejiga neurogénica, es importante tomar medidas para prevenir lesiones en la médula espinal, como usar cinturones de seguridad y cascos al practicar deportes de contacto. Además, es importante tratar las enfermedades neurológicas y las afecciones médicas de manera efectiva para prevenir complicaciones que puedan afectar la función de la vejiga.