Tendinitis: causas, síntomas y tratamiento

La tendinitis es una inflamación de los tendones que puede causar dolor, hinchazón y dificultad para mover la articulación afectada. El diagnóstico se realiza mediante una evaluación física y pruebas de imagen. El tratamiento puede incluir reposo, medicamentos y fisioterapia. Para prevenir la tendinitis, es importante realizar ejercicios de calentamiento, utilizar el equipo adecuado y descansar adecuadamente después de la actividad física.

Introducción

La tendinitis es una inflamación de los tendones, que son las estructuras que unen los músculos con los huesos. Esta afección puede afectar a cualquier tendón del cuerpo, pero es más común en los tendones de las muñecas, los codos, los hombros, las rodillas y los tobillos.

Epidemiología

La tendinitis es una afección común que afecta a personas de todas las edades y géneros. Es más común en personas que realizan actividades físicas repetitivas, como deportistas, trabajadores manuales y músicos.

Cuadro clínico

Los síntomas de la tendinitis incluyen dolor en la zona afectada, sensibilidad al tacto, hinchazón y rigidez. En algunos casos, puede haber dificultad para mover la articulación afectada.

Causas

La tendinitis puede ser causada por una lesión aguda, como una caída o un golpe, o por una actividad física repetitiva. También puede ser causada por una mala postura o por el envejecimiento.

Síntomas

Los síntomas de la tendinitis incluyen dolor en la zona afectada, sensibilidad al tacto, hinchazón y rigidez. En algunos casos, puede haber dificultad para mover la articulación afectada.

Diagnóstico de tendinitis

La tendinitis es una inflamación de los tendones, que son las estructuras que conectan los músculos con los huesos. Los síntomas incluyen dolor, hinchazón y dificultad para mover la articulación afectada. Para diagnosticar la tendinitis, el médico puede realizar una evaluación física y solicitar pruebas de imagen, como radiografías o resonancias magnéticas. También puede ser necesario realizar una prueba de sangre para descartar otras afecciones.

Tratamiento de tendinitis

El tratamiento de la tendinitis depende de la gravedad de la lesión. En casos leves, se puede recomendar reposo, hielo, compresión y elevación de la zona afectada. También pueden recetarse medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como ibuprofeno o naproxeno. En casos más graves, puede ser necesario el uso de férulas o yesos, fisioterapia o incluso cirugía.

Prevención de tendinitis

Para prevenir la tendinitis, es importante realizar ejercicios de calentamiento antes de cualquier actividad física. También es importante utilizar el equipo adecuado y mantener una postura correcta durante la actividad física. Es recomendable realizar estiramientos después de la actividad física y descansar adecuadamente para permitir que los músculos y tendones se recuperen.

Referencias