Hernia Umbilical: Síntomas, causas y tratamiento
La hernia umbilical es una protuberancia en el ombligo causada por una debilidad en la pared abdominal. El diagnóstico se realiza mediante un examen físico y en algunos casos, una ecografía. El tratamiento puede incluir cirugía y la prevención se centra en mantener un peso saludable y fortalecer los músculos abdominales.
Introducción
La hernia umbilical es una enfermedad que se produce cuando una parte del intestino sobresale a través de una abertura en los músculos abdominales. Esta abertura se encuentra en la zona del ombligo y es muy común en bebés, aunque también puede presentarse en adultos.
Epidemiología
La hernia umbilical es una de las hernias más comunes en los recién nacidos, afectando a un 20% de los bebés. En los adultos, la incidencia es menor, afectando a un 6% de la población.
Cuadro clínico
Los síntomas de la hernia umbilical incluyen una protuberancia en la zona del ombligo, que puede ser dolorosa o no, y que se hace más evidente cuando el bebé llora o hace esfuerzos. En los adultos, la protuberancia puede ser más grande y dolorosa, y puede ser acompañada de náuseas y vómitos.
Causas
La hernia umbilical se produce cuando hay una debilidad en los músculos abdominales, lo que permite que una parte del intestino sobresalga. Esta debilidad puede ser congénita o adquirida, y puede ser causada por una variedad de factores, como la obesidad, el embarazo, la tos crónica o el levantamiento de objetos pesados.
Síntomas
Los síntomas de la hernia umbilical pueden variar según la edad y la gravedad de la hernia. En los bebés, la protuberancia puede ser pequeña y no causar ningún síntoma, mientras que en los adultos, la protuberancia puede ser más grande y dolorosa, y puede ser acompañada de náuseas y vómitos.
Diagnóstico de Hernia – Umbilical
La hernia umbilical es una protuberancia que se forma en la zona del ombligo debido a una debilidad en la pared abdominal. El diagnóstico se realiza mediante un examen físico en el que se palpa la zona afectada y se evalúa la presencia de dolor o molestia. En algunos casos, se puede realizar una ecografía para confirmar el diagnóstico.
Tratamiento de Hernia – Umbilical
El tratamiento de la hernia umbilical depende del tamaño y la gravedad de la protuberancia. En algunos casos, la hernia puede desaparecer por sí sola, pero en otros es necesario realizar una cirugía para reparar la pared abdominal. Durante la cirugía, se coloca una malla para reforzar la zona afectada y evitar que la hernia vuelva a aparecer.
Prevención de Hernia – Umbilical
Para prevenir la hernia umbilical, es importante mantener un peso saludable y evitar levantar objetos pesados de manera incorrecta. También se recomienda fortalecer los músculos abdominales mediante ejercicios específicos. En el caso de los bebés, es importante evitar que lloren en exceso y mantener el cordón umbilical limpio y seco.