Hemorragia Subaracnoidea: Causas, Síntomas y Tratamiento

La hemorragia subaracnoidea (HSA) es una emergencia médica que se produce cuando hay sangrado en el espacio subaracnoideo, la zona que se encuentra entre el cerebro y las membranas que lo cubren. Los síntomas más comunes de la HSA son dolor de cabeza intenso, náuseas, vómitos y rigidez en el cuello. El tratamiento de la HSA depende de la causa del sangrado y de la gravedad de los síntomas. En algunos casos, se puede controlar el sangrado mediante medicamentos y reposo en cama.

Introducción sobre hemorragia subaracnoidea

La hemorragia subaracnoidea es un tipo de sangrado que ocurre en el espacio entre el cerebro y las membranas que lo cubren. Es una afección grave que puede ser fatal si no se trata de manera adecuada.

Epidemiología de hemorragia subaracnoidea

La hemorragia subaracnoidea es una afección poco común, que representa aproximadamente el 5% de todos los tipos de accidentes cerebrovasculares. Afecta a personas de todas las edades, pero es más común en personas de entre 45 y 70 años de edad. Las mujeres tienen un riesgo ligeramente mayor que los hombres de padecer esta afección.

Cuadro clínico de hemorragia subaracnoidea

Los síntomas de la hemorragia subaracnoidea pueden variar de una persona a otra, pero los más comunes incluyen dolor de cabeza intenso y repentino, náuseas, vómitos, rigidez en el cuello, pérdida de conciencia, convulsiones y problemas para hablar o comprender el lenguaje.

Causas de hemorragia subaracnoidea

La hemorragia subaracnoidea puede ser causada por una variedad de factores, incluyendo aneurismas cerebrales, malformaciones arteriovenosas, traumatismos craneales, uso de drogas recreativas y trastornos de la coagulación de la sangre.

Síntomas de hemorragia subaracnoidea

Los síntomas de la hemorragia subaracnoidea pueden aparecer repentinamente y empeorar rápidamente. Si experimenta alguno de estos síntomas, busque atención médica de inmediato.

Diagnóstico de Hemorragia Subaracnoidea

La hemorragia subaracnoidea (HSA) es una emergencia médica que se produce cuando hay sangrado en el espacio subaracnoideo, la zona que se encuentra entre el cerebro y las membranas que lo cubren. Los síntomas más comunes de la HSA son dolor de cabeza intenso, náuseas, vómitos y rigidez en el cuello. El diagnóstico se realiza mediante una tomografía computarizada (TC) o una resonancia magnética (RM) del cerebro, una punción lumbar o una angiografía cerebral.

Tratamiento de Hemorragia Subaracnoidea

El tratamiento de la HSA depende de la causa del sangrado y de la gravedad de los síntomas. En algunos casos, se puede controlar el sangrado mediante medicamentos y reposo en cama. En otros casos, se puede necesitar una cirugía para reparar el aneurisma o la malformación arteriovenosa que causó la HSA. Además, se pueden administrar medicamentos para controlar el dolor y la presión arterial, y se pueden realizar terapias de rehabilitación para ayudar a recuperar la función cerebral.

Prevención de Hemorragia Subaracnoidea

La prevención de la HSA implica controlar los factores de riesgo, como la hipertensión arterial, el tabaquismo, el consumo de alcohol y el uso de drogas ilegales. Además, es importante someterse a exámenes médicos regulares para detectar cualquier problema de salud que pueda aumentar el riesgo de HSA. Si se ha tenido una HSA previamente, es importante seguir las recomendaciones del médico para prevenir futuros episodios.

Referencias

  • Connolly ES Jr, Rabinstein AA, Carhuapoma JR, et al. Guidelines for the management of aneurysmal subarachnoid hemorrhage: a guideline for healthcare professionals from the American Heart Association/American Stroke Association. Stroke. 2012;43(6):1711-1737.
  • Steiner T, Juvela S, Unterberg A, et al. European Stroke Organization guidelines for the management of intracranial aneurysms and subarachnoid haemorrhage. Cerebrovasc Dis. 2013;35(2):93-112.
  • Kowalski RG, Claassen J, Kreiter KT, et al. Initial misdiagnosis and outcome after subarachnoid hemorrhage. JAMA. 2004;291(7):866-869.