La Enfermedad de Crohn es una afección inflamatoria crónica del sistema digestivo que puede afectar cualquier parte de este, desde la boca hasta el ano. Es una enfermedad autoinmunitaria, lo que significa que el sistema inmunológico ataca a las células y tejidos sanos del cuerpo.

Aunque la causa exacta de la Enfermedad de Crohn no se conoce, se cree que una combinación de factores genéticos y ambientales pueden contribuir a su desarrollo.

¿Cuál es la epidemiología de esta patología?

Se estima que aproximadamente 1 millón de personas en todo el mundo sufren de esta enfermedad.

Según la Federación Internacional de Enfermedades Inflamatorias Intestinales (IBD), la incidencia de la Enfermedad de Crohn varía ampliamente en diferentes regiones del mundo. En los países industrializados, la incidencia es más alta, con tasas más altas en los Estados Unidos, Europa y Australia.

En los Estados Unidos, se estima que aproximadamente 780,000 personas padecen de la Enfermedad de Crohn, y la incidencia de la enfermedad ha aumentado en un 30% en los últimos años. En el Reino Unido, se estima que aproximadamente 115,000 personas padecen de la Enfermedad de Crohn.

En Europa, se estima que aproximadamente 3 millones de personas padecen de IBD, incluyendo la Enfermedad de Crohn, y la incidencia de la enfermedad ha aumentado en un 50% en los últimos años. En Australia, se estima que aproximadamente 70,000 personas padecen de la Enfermedad de Crohn.

A nivel mundial, se estima que la incidencia de la Enfermedad de Crohn aumentará en un 70% en los próximos 10 años. La razón de este aumento en la incidencia de la enfermedad no está clara, pero se cree que puede estar relacionado con factores como la dieta, la higiene, los cambios en el estilo de vida y la exposición a sustancias tóxicas.

¿Qué factores influyen en el desarrollo de esta enfermedad?

Aunque la causa exacta de la Enfermedad de Crohn no se conoce, se cree que una combinación de factores genéticos, ambientales y autoinmunitarios juegan un papel importante en su desarrollo.

• Genética: La investigación ha demostrado que la Enfermedad de Crohn es una enfermedad genética, con un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad en personas con antecedentes familiares de IBD (inflamación crónica del intestino).
• Ambiente: El ambiente puede influir en el desarrollo de la Enfermedad de Crohn a través de factores como la dieta, la higiene y la exposición a sustancias tóxicas.

• Autoinmunidad: La Enfermedad de Crohn se cree que es causada por una respuesta anormal del sistema inmunológico al propio cuerpo, lo que resulta en una inflamación crónica del tracto digestivo.
• Microbioma: Se ha demostrado que el microbioma intestinal puede influir en el desarrollo de la Enfermedad de Crohn, con una alteración en la población bacteriana del tracto digestivo.
• Estilo de vida: El estilo de vida también puede influir en el desarrollo de la Enfermedad de Crohn, con factores como el estrés, la falta de sueño y la falta de actividad física que pueden desencadenar una exacerbación de la enfermedad.

¿En qué consiste el cuadro clínico?

El cuadro clínico de la Enfermedad de Crohn puede variar dependiendo de la ubicación y la gravedad de la inflamación, pero los síntomas más comunes incluyen:

• Dolor abdominal: El dolor abdominal es un síntoma común de la Enfermedad de Crohn, y puede variar desde un dolor leve hasta una sensación aguda y sorda.
• Diarrea: La diarrea es un síntoma frecuente de la Enfermedad de Crohn, y puede ser acompañada de sangre o moco en las heces.
• Fiebre: La fiebre es un síntoma común de la Enfermedad de Crohn, y puede estar presente en los períodos de exacerbación de la enfermedad.
• Pérdida de peso: La pérdida de peso es un síntoma común de la Enfermedad de Crohn, y puede ser causada por la pérdida de apetito, la diarrea y la malabsorción de nutrientes.
• Anemia: La anemia es un síntoma común de la Enfermedad de Crohn, y puede ser causada por la pérdida de sangre en las heces, la inflamación y la malabsorción de nutrientes.
• Fatiga: La fatiga es un síntoma común de la Enfermedad de Crohn, y puede ser causada por la inflamación crónica, la pérdida de sangre y la falta de sueño.

¿Cómo se diagnostica?

El diagnóstico de la Enfermedad de Crohn es un proceso que implica la evaluación de los síntomas, la historia clínica y los resultados de pruebas médicas específicas. La Enfermedad de Crohn es difícil de diagnosticar porque sus síntomas pueden ser similares a los de otras enfermedades digestivas, como la colitis ulcerosa y la enfermedad inflamatoria intestinal.

Las pruebas que se utilizan para diagnosticar la Enfermedad de Crohn incluyen:

• Análisis de sangre: Un análisis de sangre puede ayudar a detectar anemia, una indicación de la Enfermedad de Crohn, así como una infección o una inflamación en el cuerpo.
• Prueba de heces: Una prueba de heces puede ayudar a detectar la presencia de sangre o infección en las heces, que pueden ser signos de la Enfermedad de Crohn.
• Endoscopia: Una endoscopia es una prueba que implica el uso de un endoscopio para examinar el tracto digestivo y tomar imágenes de las áreas afectadas.
• Imágenes por resonancia magnética (IRM): Una IRM es una prueba de imagen que utiliza un campo magnético y ondas de radio para crear imágenes detalladas del interior del cuerpo.
• Tomografía computarizada (TC): Una TC es una prueba de imagen que utiliza radiación para crear imágenes detalladas del interior del cuerpo.

¿Cuáles son las complicaciones?

Algunas de las complicaciones más comunes de la Enfermedad de Crohn incluyen:

• Fístulas: pequeños conductos anormales que se forman entre los intestinos y otras partes del cuerpo, como la piel o la vejiga.
• Abscesos: acumulación de pus en el tejido abdominal.
• Estreñimiento crónico: dificultad para evacuar los excrementos.
• Anemia: falta de hierro en la sangre.
• Pérdida de peso y desnutrición: debido a la falta de absorción de nutrientes en el intestino.
• Colitis granulomatosa: inflamación en la mucosa del colon.
• Artritis: inflamación en las articulaciones.
• Lípidos en la sangre: niveles elevados de colesterol y triglicéridos.
• Osteoporosis: debilidad en los huesos.

¿En qué consiste el tratamiento? 

El tratamiento para la Enfermedad de Crohn puede incluir medicamentos para reducir la inflamación, dieta y cambios de estilo de vida, y en algunos casos, cirugía.

Los medicamentos utilizados para tratar la Enfermedad de Crohn incluyen aminosalicilatos, corticosteroides, imunomoduladores y biotecnología. Los aminosalicilatos, como el sulfasalazina, ayudan a reducir la inflamación en el intestino. Los corticosteroides, como la prednisona, son medicamentos potentes que también pueden reducir la inflamación. Los imunomoduladores, como la azatioprina y la 6-mercaptopurina, ayudan a disminuir la actividad del sistema inmunológico. Los medicamentos biológicos, como infliximab y adalimumab, son anticuerpos monoclonales que se unen a proteínas específicas en el cuerpo y ayudan a reducir la inflamación.

Además de los medicamentos, cambios en la dieta y el estilo de vida pueden ser útiles para aliviar los síntomas de la Enfermedad de Crohn. Esto puede incluir evitar alimentos que empeoran los síntomas, como alimentos grasos y alimentos picantes, y elegir una dieta equilibrada y rica en nutrientes.

En casos graves de la Enfermedad de Crohn, la cirugía puede ser necesaria para eliminar la sección del intestino afectada o para colocar un estoma temporal o permanente.

Para concluir, es de especial importancia destacar que cada caso de Enfermedad de Crohn es único, y el tratamiento adecuado dependerá de la gravedad de los síntomas y de la ubicación y el tipo de inflamación en el tracto gastrointestinal.Es necesario consultar a un profesional de la salud para recibir un diagnóstico y un tratamiento apropiados.