Acalasia: causas, síntomas y tratamiento
La acalasia es un trastorno del esófago que impide que el alimento pase correctamente hacia el estómago debido a una disfunción del músculo esofágico y el esfínter esofágico inferior. El tratamiento de la acalasia puede incluir medicamentos, dilatación esofágica o cirugía. No hay una forma conocida de prevenir la acalasia.
Introducción sobre acalasia
La acalasia es un trastorno esofágico que se produce cuando el músculo del esfínter esofágico inferior no se relaja correctamente, lo que dificulta el paso de los alimentos y líquidos desde el esófago hasta el estómago. Este trastorno puede afectar a personas de todas las edades, pero es más común en adultos mayores.
Epidemiología de acalasia
La acalasia es un trastorno raro que afecta a menos de 1 de cada 100.000 personas en todo el mundo. Se presenta con mayor frecuencia en personas de entre 25 y 60 años, y es más común en mujeres que en hombres.
Cuadro clínico de acalasia
Los síntomas de la acalasia pueden incluir dificultad para tragar, regurgitación de alimentos no digeridos, dolor en el pecho, pérdida de peso y tos nocturna. Estos síntomas pueden empeorar con el tiempo si no se tratan.
Causas de acalasia
La causa exacta de la acalasia se desconoce, pero se cree que puede estar relacionada con una disfunción del sistema nervioso que controla los músculos del esófago. También se ha relacionado con una inflamación del esófago o una infección viral.
Síntomas de acalasia
Los síntomas de la acalasia pueden incluir dificultad para tragar, regurgitación de alimentos no digeridos, dolor en el pecho, pérdida de peso y tos nocturna. Estos síntomas pueden empeorar con el tiempo si no se tratan.
¿Qué es la acalasia?
La acalasia es un trastorno del esófago que impide que el alimento pase correctamente hacia el estómago debido a una disfunción del músculo esofágico y el esfínter esofágico inferior. Esto puede provocar dificultad para tragar, dolor en el pecho y regurgitación de alimentos.
Diagnóstico de acalasia
El diagnóstico de acalasia se realiza mediante una serie de pruebas, como la endoscopia, la manometría esofágica y la radiografía con bario. Estas pruebas pueden ayudar a determinar la severidad de la acalasia y el mejor tratamiento para el paciente.
Tratamiento de acalasia
El tratamiento de la acalasia puede incluir medicamentos, dilatación esofágica o cirugía. Los medicamentos pueden ayudar a relajar el esfínter esofágico inferior, mientras que la dilatación esofágica implica el uso de un balón para estirar el músculo esofágico. La cirugía puede ser necesaria en casos graves de acalasia.
Prevención de acalasia
No hay una forma conocida de prevenir la acalasia. Sin embargo, se cree que mantener una dieta saludable y evitar el tabaco y el alcohol pueden ayudar a reducir el riesgo de desarrollar esta afección.